Nueva York, 15 ene (EFE).- El Instituto Cervantes de Nueva York inauguró este miércoles «Patria Querida», una selección de las imágenes que el fotógrafo español Alberto García-Alix realizó para retratar la tierra y las gentes de Asturias desde una mirada muy personal.
«García-Alix no sabe hacer otra cosa, tiene una mochila que desarrolla allí donde va y también rescata algo de lo que se encuentra, es un camino de ida y vuelta. Es una persona que habla de sí misma y que utiliza la fotografía como punto de encuentro», explicó a Efe el comisario de la muestra, Nicolás Combarro.
Los trabajos de García-Alix se acercan a Asturias desde la arquitectura, la naturaleza y el retrato, algo que expande los límites de la fotografía del autor.
«Una vez que cojo la cámara y me pongo a mirar, tengo que sentirme y sentir Asturias, son mis ojos los que miran. Parcelo, fragmento trozos de esa realidad para construir una especie de imaginario de Asturias», dijo en un comunicado García-Alix, que se encuentra en París, sobre el trabajo.
La inauguración de la exposición ha sido precedida por un concierto de Año Nuevo interpretado por el Quinteto Ventart, que llenó el auditorio del Instituto Cervantes, al que también acudió el futbolista asturiano y ahora jugador del New York City David Villa.
«La gente de Asturias ama mucho a su tierra», dijo la consejera de Educación, Cultura y Deporte de esta comunidad autónoma, Ana González Rodríguez, al respecto.
«Patria Querida», que antes de viajar a la Gran Manzana se expuso en Gijón, Madrid y Lisboa, forma parte de la serie de trabajos que la Fundación María Cristina Masaveu Peterson encarga a fotógrafos que han sido galardonados con el Premio Nacional de Fotografía para que den su punto de vista sobre Asturias.
Alberto García-Alix, que fue distinguido con el Premio Nacional de Fotografía en 1999, fue el primero en atreverse a ofrecer una visión personal de la región, un trabajo que aceptó porque no imponía ninguna «condición» a su mirada y que tardó todo un año en realizar.