Expo_Laura_Torrado_PHE13_3La Comunidad de Madrid renueva su alianza con PHotoEspaña, y en esta edición de 2013 vuelve al Canal de Isabel II para presentar en su sala de exposiciones la colección «La oscuridad natural de las cosas», de Laura Torrado. Una retrospectiva que resume veinte años de trabajo de una las artistas españolas de referencia en el último cuarto de siglo.

Madrid.  Eduardo Parra.- Es cierto que un artista puede no tener títulos y aun así ser un genio. No tenerlos no significa nada, pero poseerlos probablemente algo implica. Laura Torrado, recientemente doctorada «summa cum laude» en Bellas Artes, es de esas artistas con un currículo que impresiona: hasta siete becas desde 1990, Premio Purificación García de Fotografía, Premio de Artes Plásticas de la Comunidad de Madrid… Su trabajo forma parte, entre otras, de las colecciones de las fundaciones de Altadis y Coca-Cola, así como de la Colección de la Comunidad de Madrid.

Ahora su hoja de servicios añade una línea más con el nombre de PHotoEspaña 2013. Y es que con motivo de la celebración del festival y hasta el 4 de agosto, parte de su obra podrá verse en el carismático espacio expositivo del Canal de Isabel II. «La oscuridad natural de las cosas» es el título -tomado prestado, por cierto, de un texto de Charles Baudelaire- de esta retrospectiva de Laura Torrado, una colección que recoge dos décadas de trabajo «introspectivo y multidisciplinar» de la madrileña.

Si el trasfondo de PHotoEspaña 2013 es el cuerpo («tu cuerpo es el mensaje», reza la publicidad del evento), el trabajo de Torrado encaja como anillo al dedo: sus fotografías son una aproximación al cuerpo y el rostro utilizando filosofías y puntos de vista provenientes de la escultura o incluso del teatro.

on más de treinta imágenes, vídeos y dibujos las piezas que conforman esta muestra. La propia Torrado está presente en algunas de ellas pero no en todas, ya que ha contado con modelos y actores para protagonizar sus fotografías y grabaciones.

Organizada en base al particular diseño arquitectónico de la sala de exposiciones -un antiguo depósito de agua-, la colección está estructurada en plantas. La primera de ellas acoge una serie de autorretratos titulada «Yo y yo misma» que rinde un pequeño homenaje a las artistas Rebecca Horn y Louise Bourgeois. En el segundo piso se presenta una peculiar exploración del cuerpo dotada de hilo narrativo bajo el título «Cuentos», y en el último reposa la colección «Representaciones», que ofrece las particulares visiones que tiene la artista del universo femenino.

 

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