El País / Fotos de la transición de Marisa Flórez. La fotoperiodista leonesa Marisa Flórez recogió ayer en Palencia el VI Premio Nacional de Fotografía Piedad Isla en reconocimiento a su trabajo desde la transición, y sostuvo que lo importante es
«vivir el momento que te toca y poder aportar a tu trabajo ideas, creatividad y ganas de hacer cosas».
Un premio que le ha concedido la Diputación de Palencia y que ha recibido con «sorpresa». «No me lo esperaba y me ha hecho mucha ilusión porque Piedad Isla era una gran fotógrafa, una adelantada a su tiempo, pero además, mirando la lista de premiados anteriores, me parece una maravilla», aseguró.
Un premio que reconoce «los méritos que acreditan a Marisa Flórez como una de las más
grandes fotoperiodistas del panorama nacional durante la transición y en el periodo democrático, desde las páginas del periódico El País, donde comenzó a trabajar en 1976»,
recordó la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén. A ese respecto, Flórez reconoció la oportunidad que le supuso vivir profesionalmente «en una época fantástica, donde todo estaba cambiando, la sociedad, la política, los personajes, la apertura cultural, una época maravillosa». Una época y un momento social y político que le permitió ser testigo «desde la primera línea,
en los lugares donde se estaba cociendo todo» y además «en un medio que sigue siendo referente del periodismo en este país». Premio Nacional de Periodismo en 1981, Marisa Flórez fue testigo, desde mediados de los años setenta, de un sinfín de momentos nuevos en la sociedad y la política española.
