Cristina Fanjul. Diario de León.
La Bibloteca pública inaugura hoy la exposición Evolución urbana de León, muestra integrada dentro del ciclo denominado Aquel León. El título de la exposición hace referencia a la ciudad como un organismo vivo, cuya imagen se manifiesta en una compleja superposición de tejidos que se encuentran en constante movimiento. A través de 56 fotografías, los organizadores pretenden presentar la mutabilidad de esta trama que es fruto de la incesante e inacabada tarea de construcción, demolición y modificación.
En la exposición se presentan algunas estampas urbanas, a través de las cuales se puede observar la evolución de determinados espacios y rincones de la ciudad desde finales del siglo XIX a mediados del XX. La colección se ha estructurado en tres partes: edificaciones singulares que han sido modificadas y rehabilitadas, quedando de manifiesto las soluciones arquitectónicas, edificios que han sido trasladados de lugar, y construcciones desaparecidas.
De alguno de los espacios expuestos se va a mostrar una secuencia de fotografías, compuesta por tres o cuatro imágenes ordenadas cronológicamente, lo que permite al visitante apreciar el mismo espacio o conjunto arquitectónico en momentos distintos. Este es el caso de los edificios del Ayuntamiento, Diputación, Convento de Santo Domingo o Casa de las carnicerías.
Todas las fotografías que se exponen pertenecen al fondo de imágenes de la Biblioteca Pública, que obtuvo en concepto de donación de particulares a través de la iniciativa denominada Conocer aquel León, que se celebra desde el año 2007 con la intención de enriquecer el fondo de imágenes fotográficas de temática local.
El año pasado, la Biblioteca Pública recopiló más de 4.000 fotos, cedidas por particulares, con las que se organizó la exposición Aquel León 2, continuidad de la iniciativa que se puso en marcha hace tres años. Entonces, la Biblioteca Pública de León, que dirige Alfredo Díez Escobar, tuvo la idea de pedir a los ciudadanos fotos anteriores a 1960 e inéditas. Aconsejó a los leoneses que rebuscaran en los portarretratos de su casa y en colecciones olvidadas. La única condición era que las instantáneas fueran anteriores a 1960.
El objetivo era digitalizarlas y crear una base accesible a todo el mundo. El proyecto, titulado Conocer aquel León, pretendía rescatar rincones, edificios y gentes que sólo existen ya en papel fotográfico, un soporte frágil que acabará perdiéndose con el paso de los años.
En aquella «colecta» popular se recopilaron más de 700 imágenes, con las que se organizó una exposición. El libro recoge una pequeña selección, en la que ha prevalecido el criterio de documento social. Todo el trabajo, que culminó con la edición del libro, y que ha servido para incrementar la colección fotográfica de la Biblioteca Pública de León, tuvo su germen en las donaciones realizadas unos años antes por Concha Casado Lobato y Marina Riesco Grijuela. El libro lo coordinó Díez Escobar y los textos son de Pío Cimadevilla Sánchez.
La mayoría de los fotógrafos son desconocidos, aunque también se incluyen imágenes de profesionales como Germán Gracia, Loty, la Gafa de Oro y César Andrés. El libro tiene un valor antropológico. En las páginas de Aquel León se descubren decenas de inmuebles que, uno a uno, fueron pereciendo, desde el Teatro Principal al Instituto Politécnico (solar que hoy ocupa el Instituto Juan del Enzina) y aquellos chalés propiedad de leoneses ilustres que poblaban Ordoño II, amén de los últimos representantes de la arquitectura tradicional leonesa, como las casas con soportales de la plaza de Santa Ana.
Lugar: Sala de Conferencias Biblioteca Pública de León. C/ Santa Nonia, nº 5.
Hora: 20.00.