fernando-oteroE. Gancedo / Diario de León
Fernando Otero, fotógrafo del Diario y realizador, gana el premio al mejor corto documental en el Festival Sunnyside de Nueva York con la historia de una barbería dublinesa reconvertida en escenario para ‘gourmets’ de la música.

«En el fondo, yo creo que el auténtico mensaje de esta película es el de ‘querer es poder’. Eres un peluquero, sólo un sencillo peluquero, pero tu pasión por la música te puede llevar a convertirte en el promotor de uno de los mayores festivales del país. Es algo que de algún modo todos podemos aplicar a nuestras vidas». Lo cuenta Fernando Otero Perandones, bañezano de 1982, fotógrafo de este periódico, detallista realizador audiovisual y ahora orgulloso ganador del premio al mejor cortometraje documental del Festival Internacional Sunnyside de Nueva York por More than a barbershop, la historia de una peluquería de barrio que llegó a ser escenario y lugar de exhibición para delikatessen musicales.

Otero conoció este mágico lugar ubicado en el barrio de Rathmines, al sur de Dublín, durante su estancia de tres años en la capital irlandesa, donde desempeñó los más diversos trabajos, y gracias a su amigo el asturiano Xandru Fernández, con quien ha codirigido el filme: «El escaparate de esta barbería, Abner Browns, está repleto de guitarras, trompetas y otros instrumentos, decenas de discos se alinean junto a tijeras y lociones, y una antigua gramola también atrae la atención». La singular aleación de fotos, álbumes, recuerdos y otros documentos musicales, con los útiles propios de la profesión, llevó a Fernando y a Xandru a interesarse cada vez más por la historia del establecimiento… y una vez conocida, a darla a conocer al mundo. «Su dueño, Dave Judge, es un auténtico loco de la música, como también Peter, su socio. Peluquero de profesión, de vez en cuando bajaba la guitarra de la pared para ensayar unos acordes hasta que un buen día se planteó organizar conciertos allí mismo», narra Otero Perandones. «En cuanto terminan el trabajo mueven sillas, colocan luces, ajustan el equipo de sonido… y da comienzo el recital —continúa—. La gente se sienta en las sillas e incluso en los butacones de barbero, y asiste casi en silencio, con veneración, a la actuación. No se cobra entrada, el grupo tampoco percibe nada y el ambiente es increíble, de gente que realmente le gusta y aprecia la buena música».

Un sueño cumplido

Una curiosa aventura que comenzó hace cuatro años y que desbordó a sus propios creadores: no sólo Abner Browns es ahora lugar de peregrinación para gourmets musicales y para algunas de las mejores bandas del país sino que Judge acabó convertido en mánager, productor y responsable de uno de los festivales más multitudinarios de Irlanda. «Toda una celebridad», define Otero.

Los españoles le propusieron realizar un documental sobre su barbería musical y él aceptó encantado: «Lo que queráis», les dijo. Por pura casualidad, Blair Packham, una gran estrella en Canadá y otros países anglosajones, estaba grabando en un estudio de la ciudad, así que empezamos entrevistándole en su estudio y, esa misma noche, grabando el concierto que tenía previsto ofrecer en Abner Browns. También rodaron diferentes recitales y testimonios de los responsables del local y de asistentes, componiendo una película repleta de ritmo.

La edición se completó cuando el leonés ya estaba en España, y cree Fernando Otero que bien puede ser ésta «la primera peli íntegramente montada a través de skype». Eso sí, el estreno tuvo lugar, como no podía ser otra manera, en la propia peluquería («no cabía un alma»), y todo el mundo quedó «encantado».

More than a barbershop es espejo de un sueño cumplido, pero también de toda una manera de entender la música. «De algún modo es el reflejo de cómo la música está siempre presente en esta ciudad, vas por la calle y escuchas a gente de una calidad increíble, es el componente esencial de la ‘alegría de Dublín’», cuenta, y pone el acento el bañezano, además, en la «extraordinaria cantera de músicos» con la que cuenta Irlanda a todos los niveles, por supuesto también el internacional.

El documental fue premiado entre los 1.200 cortos llegados desde las más diversas partes del mundo al Festival Sunnyside, con sede en el distrito neoyorquino de Queens, pero también está girando por otros certámenes: sin ir más lejos, ya ha sido seleccionado en tres concursos irlandeses. Sus directores trabajan ahora en su subtitulado, de forma que pueda exhibirse en festivales españoles y en proyecciones puntuales.

Otero Perandones es Técnico Superior en Imagen y ha trabajado, entre otras empresas, en la productora Geográfica Films y junto a los equipos responsables de programas televisivos tan populares como Callejeros o Frank de la Jungla.

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