![\"Foto-Antonio\"](\"http:\/\/focusleon.es\/wp-content\/uploads\/2014\/03\/Foto-Antonio.jpg\")
Ana Gaitero. Diario de Le\u00f3n \/ De la La R\u00faa a la 56\u00aa Avenida. De Le\u00f3n a Nueva York. El legado de Foto Antonio, m\u00e1s de un mill\u00f3n de negativos que contienen instant\u00e1neas de la vida del Le\u00f3n de posguerra y franquista y los retratos de miles de leonesas y leoneses que posaron en su estudio, ha volado a Estados Unidos.<\/p>\n
La Universidad de Nueva York, y en concreto, la Art Gallery del Queensborough Community College guarda en su archivo el \u00abtesoro\u00bb art\u00edstico e hist\u00f3rico de Antonio D\u00edez Carracedo, \u00abFoto Antonio\u00bb, quien durante m\u00e1s de 40 a\u00f1os tuvo abierto estudio en la calle La R\u00faa y trabaj\u00f3 como reportero gr\u00e1fico para el Diario de Le\u00f3n y Proa y las agencias Efe, Cifra Gr\u00e1fica y Alfil.<\/p>\n
El fot\u00f3grafo ofreci\u00f3 su colecci\u00f3n a la Diputaci\u00f3n de Le\u00f3n y recibi\u00f3 la callada por respuesta. \u00ab\u2018Somos vecinos, ya te llamar\u00e9\u2019, me dijo el entonces diputado de Cultura, Marcos Mart\u00ednez\u00bb, comenta el fot\u00f3grafo. En Nueva York, en cambio, \u00abestamos muy orgullosos de conservar y promulgar esta documentaci\u00f3n hist\u00f3rica\u00bb, afirma el benefactor de la colecci\u00f3n Faustino Quintanilla, director ejecutivo de la QCC Art Gallery.<\/p>\n
Ex agustino, pintor, licenciado en Arte y Teolog\u00eda y sacerdote de la iglesia ortodoxa, vive en Estados Unidos de Am\u00e9rica desde 1971. Es leon\u00e9s y fue monaguillo de San Isidoro cuando era ni\u00f1o. Las vidas de Antonio D\u00edez y Faustino Quintanilla se cruzaron en la calle La R\u00faa, pero no f\u00edsicamente sino en el escaparate de Foto Antonio.<\/p>\n
\u00abVe\u00eda las fotos de Le\u00f3n y entraba a comprarle las que me gustaban cuando ven\u00eda a Le\u00f3n\u00bb, cuenta en un espa\u00f1ol que desvela fuerte acento americano que ha adquirido despu\u00e9s de tantos a\u00f1os residiendo en Am\u00e9rica. Poco a poco, foto a foto, se fragu\u00f3 una amistad.<\/p>\n
Ahora afirma sentirse \u00abinmensamente privilegiado como leon\u00e9s de poder archivar en nuestra instituci\u00f3n de la Galer\u00eda de Arte del Colegio de la Comunidad de Queens, la Ciudad Universitaria de Nueva York, la obra art\u00edstica y archivos de Foto Antonio con la finalidad de su conservaci\u00f3n, estudio, exposici\u00f3n y publicaci\u00f3n\u00bb, seg\u00fan comunic\u00f3 por escrito al fot\u00f3grafo cuando acept\u00f3 la propuesta.<\/p>\n
Antonio D\u00edez Carracedo vino a Le\u00f3n desde el otro lado del Atl\u00e1ntico. Naci\u00f3 hace 82 a\u00f1os en Tres Arroyos (Argentina). Tanto su padre como su madre eran leoneses y al finalizar la Guerra Civil decidieron regresar a la tierra con la familia. Se asentaron en la calle La R\u00faa, arteria principal del Camino de Santiago en la capital, que poco a poco se convirti\u00f3 en floreciente calle comercial.<\/p>\n
Pese a lo mucho que ha corrido con su c\u00e1mara, e incluso con el material de revelado y la ampliadora, casi toda su vida ha transcurrido en la c\u00e9ntrica calle de la R\u00faa de los Francos. Todav\u00eda cuelga de la fachada del n\u00famero 9 el letrero de Foto Antonio. Los escaparates, anta\u00f1o plet\u00f3ricos de retratos y postales, ya no muestran m\u00e1s im\u00e1genes que el reflejo de los curiosos que se asoman a sus lunas y el paso del tiempo.<\/p>\n
El muchacho Antonio empez\u00f3 a trabajar como ayudante en Foto Garay en los a\u00f1os 40. En la calle La R\u00faa. \u00abNecesitaban un chico y ah\u00ed estuve yo\u00bb, explica mientras lamenta la desmemoria de la ciudad con otro de sus fot\u00f3frafos de referencia: \u00abGaray, otro olvidado\u00bb, afirma.<\/p>\n
Fue testigo de una \u00e9poca en que la fotograf\u00eda depend\u00eda de la luz del d\u00eda. Recuerda los carteles de \u00abhoy no se retrata por falta de luz\u00bb. Los fot\u00f3grafos los colgaban en las puertas de sus estudios los d\u00edas nublados. La luz \u00abes el \u00fanico secreto de la fotograf\u00eda, lo descubri\u00f3 Da Vinci\u00bb, afirma.<\/p>\n
Para fijar las im\u00e1genes, el magnesio y el polvo de aluminio fueron sus primeros ayudantes qu\u00edmicos. La voluntad y su esp\u00edritu decidido, sus aliados toda la vida. \u00abHab\u00eda que atar a la gente para hacer un DNI\u00bb, comenta. Conserva su vieja c\u00e1mara de placas, un artilugio con ruedas que a\u00fan funciona y que capta la imagen invertida por reflexi\u00f3n, como la retina del ojo. La c\u00e1mara de estudio Anaca vino desde Alemania y hoy merecer\u00eda estar en un museo.<\/p>\n
La mezcla \u2018explosiva\u2019 para captar la luz tambi\u00e9n le dio alg\u00fan susto. \u00abUna vez en Semana Santa, desde el caf\u00e9 Victoria, me pus\u00e9 a hacer una foto a una procesi\u00f3n nocturna ech\u00e9 mucho magnesio para captar m\u00e1s luz y se produjo una deflagraci\u00f3n con gran ruido\u00bb, cuenta.<\/p>\n
La fotograf\u00eda se convirti\u00f3 en el sustento para este hombre sencillo cuya carrera se condensa en un gran archivo olvidado por las instituciones leonesas. \u00abSe lo ofrec\u00ed a Caja Espa\u00f1a y me lo pidieron de la Filmoteca de Castilla y Le\u00f3n, pero todo lo quieren gratis y encima les ten\u00eda que pedir yo permiso para usar las fotos\u00bb, cuenta. La fotograf\u00eda fue su \u00abmanera de vivir, de malvivir\u00bb, matiza. culando…\u00bb.<\/p>\n
Cuando le lleg\u00f3 la hora de cumplir con la patria, por su condici\u00f3n de argentino pod\u00eda elegir entre Espa\u00f1a y su pa\u00eds de nacimiento. Se decidi\u00f3 por la aventura argentina. All\u00ed lo hicieron fot\u00f3grafo del regimiento motorizado Patricios. Corr\u00eda el a\u00f1o 1957 y otra dictadura. Antonio aprovech\u00f3 su estancia en Buenos Aires para abrir su primer estudio propio. Pronto regres\u00f3. Se cas\u00f3 y se estableci\u00f3 de nuevo en La R\u00faa. En el n\u00famero 49.<\/p>\n
\u00ab\u00c9ramos el n\u00famero uno. Nadie llegaba antes que nosotros. Mi mujer en el laboratorio y yo retratando\u00bb, comenta. Empez\u00f3 a trabajar para el Proa, el peri\u00f3dico provincial del Movimiento. \u00abMe march\u00e9 cuando el director me dijo: \u2018Me arreglo con recortes\u2019. Yo le contest\u00e9: \u2018Pues yo me arreglo sin usted\u2019\u00bb.<\/p>\n
En aquella d\u00e9cada se centr\u00f3 mucho en el reportaje period\u00edstico y pon\u00eda todos sus afanes en buscar temas de inter\u00e9s nacional para vender sus fotos a la Agencia Efe y sus filiales Alfil y Cifra Gr\u00e1fica. \u00abDijo un alem\u00e1n que la cama no era para dormir, sino para pensar. Le\u00f3n era muy peque\u00f1o y por la noche pensaba qu\u00e9 mandar al d\u00eda siguiente. Un periodista se me ofreci\u00f3 a poner los pies de foto y le dije que para eso ya me serv\u00eda yo\u00bb, comenta.<\/p>\n
La foto de la casa del Chupa Chus, en Ordo\u00f1o II, fue una de las que le compraron para la prensa nacional \u00abporque estuvo apuntalada mucho tiempo\u00bb. Otra vez retrat\u00f3 a un gitano que toreaba sin toro, conocido como el Cordob\u00e9s: \u00abEn el pie de foto puse: D\u00edcese ser el Cordob\u00e9s aut\u00e9ntico porque empez\u00f3 antes que el otro\u00bb.<\/p>\n
Trabajar para la prensa no era ninguna bicoca. \u00abNi el peri\u00f3dico ni la agencia me interesaban por lo que pagaban, solamente para poder entrar en los actos\u00bb, reconoce. En aquel tiempo, era costumbre que los fot\u00f3grafos revelaran y positivaran las instant\u00e1neas lo m\u00e1s r\u00e1pido posible no s\u00f3lo para llegar a tiempo a la rotativa, sino para ofrec\u00e9rselas a las autoridades y personajes que acud\u00edan a los eventos.<\/p>\n
El marqu\u00e9s de Villavicencio, jefe de la casa de Franco, le bautiz\u00f3 como el \u00abfot\u00f3grafo del clero\u00bb. \u00abFui el \u00fanico al que dejaron entrar a hacer la foto de la entrevista de Franco con el cardenal Land\u00e1zuri en San Isidoro durante el congreso eucar\u00edstico\u00bb, explica.<\/p>\n
Le encargaron realizar el \u00e1lbum diario de los actos para el Obispado y para Land\u00e1zuri, \u00abarzobispo de Lima, primado del Per\u00fa y legado pontificio del Congreso Eucar\u00edstico en Le\u00f3n\u00bb. Todo el s\u00e9quito, incluido el cardenal, \u00abcompraron fotos en mi casa\u00bb. Se cumplen 50 a\u00f1os de aquel verano de 1964 en el que sotanas y mitras sembraron Le\u00f3n de una mayor raci\u00f3n de rezos de la ya habitual en aquel tiempo y en aquella ciudad. Franco y el cardenal se pasearon en sus coches oficiales, en pie, saludando y bendiciendo a los leoneses.<\/p>\n
El A\u00f1o Santo Isidoriano, de 1960, tambi\u00e9n guarda im\u00e1genes imborrables para este fot\u00f3grafo. Recuerda al Obispo Almarcha rompiendo la pared de ladrillos de la Puerta del Perd\u00f3n de la Bas\u00edlica con una maza, como manda la tradici\u00f3n. No sabe es si termin\u00f3 la obra o lo hicieron otros por \u00e9l. Antonio no esper\u00f3. March\u00f3 r\u00e1pido a revelar, como siempre.<\/p>\n
Un hombre pr\u00e1ctico por encima de todo, asegura que \u00abno era del r\u00e9gimen, pero quer\u00eda trabajar\u00bb y sab\u00eda desenvolverse entre las jerarqu\u00edas de aquella dictadura. Y defender su trabajo. \u00abS\u00ed, presum\u00eda de ser el fot\u00f3grafo m\u00e1s caro de Le\u00f3n pero por derecho y por trabajo… Cuando empez\u00f3 el color ya cobraba yo 500 pesetas por un 18-24\u00bb, recuerda.<\/p>\n
Antonio no permit\u00eda que le ningunearan. \u00abYo le di importancia a la fotograf\u00eda. Cuando inauguraron Cementos La Robla estaba tirando fotos y una autoridad va y me dice: \u2018Ustedes siempre estorbando\u2019. Yo pens\u00e9: El que estorba es usted porque no va a salir m\u00e1s en la foto. Se debi\u00f3 dar cuenta porque luego me salud\u00f3 muy amable\u00bb, relata.<\/p>\n
En aquellos tiempos el poder pol\u00edtico lo controlaba todo, empezando por los carn\u00e9s de prensa, pero desconoc\u00edan c\u00f3mo controlar ciertas cosas del oficio de periodista y fot\u00f3grafo. \u00abNo tir\u00e9 nunca con teleobjetivo a ninguna autoridad, estuve hablando con uno de los soldados de la guardia mora en San Marcos. A la puerta de d\u00f3nde dorm\u00eda Franco. A ver si hoy se puede hacer eso aunque sea un concejal\u00bb, recalca. A Franco, asegura, le retrat\u00f3 a 50 cent\u00edmetros. \u00abLo \u00fanico que te ped\u00edan es que le retrataras por un lado del perfil, no por el otro…\u00bb, admite.<\/p>\n
A prop\u00f3sito de la accesibilidad de los medios informativos a los espacios y eventos p\u00fablicos le gusta mostrar el texto del carn\u00e9 de fot\u00f3grafo: \u00abSe suplica a las autoridades el m\u00e1ximo apoyo al titular de este carn\u00e9\u00bb. \u00abComo ahora, \u00bfverdad?\u00bb, dice sin rodeos.<\/p>\n
Fue testigo de eventos como el incendio de la Catedral de Le\u00f3n, en 1966, recuerda que ven\u00eda en coche por la carretera de Asturias \u00aby dice mi hija: Mira pap\u00e1, est\u00e1 ardiendo… cog\u00ed el equipo y\u00a0pall\u00e1<\/i>, las mandamos a la agencia esa misma noche\u00bb.<\/p>\n
Tambi\u00e9n recuerda el incendio del cuartel del Cid, con suelos de madera que ardieron como la yesca. \u00abHab\u00eda balas en los huecos de la muralla y se oyeron varias detonaciones\u00bb, rememora. Le gusta decir que en Le\u00f3n no tenemos mar, pero tenemos almirante para recordar a Mart\u00edn Granizo y su presencia en la inauguraci\u00f3n del Club N\u00e1utico del pantano de Luna.<\/p>\n
Vio levantar los muros de tres embalses. El de Luna, el del Porma y el de Ria\u00f1o. Entr\u00f3 en las Cuevas de Valporquero a fotografiar su interior antes de que se abrieran al p\u00fablico y recuerda especialmente la colecci\u00f3n de fotos que realiz\u00f3 de San Miguel de Escalada.<\/p>\n
Del estudio, su principal m\u00e9rito y en lo que se considera un maestro, es en los retoques: \u00abCon las feas hacemos locuras y con las guapas preciosidades\u00bb, bromea. El photoshop de ahora era un simple l\u00e1piz que Antonio manejaba a las mil maravillas.<\/p>\n
En el vest\u00edbulo del que fue su estudio tiene un retrato del inventor de la fotograf\u00eda, Joseph Nic\u00e9phore Ni\u00e9pce que restaur\u00f3 con su depurada t\u00e9cnica. Del estudio tiene miles de an\u00e9cdotas, hasta de gente que sal\u00eda a la calle a buscar a un chaval para completar la familia numerosa.<\/p>\n
Antonio se jacta de que \u00abnunca com\u00ed con las autoridades aunque tengo las invitaciones. Juntos, pero no revueltos. Ley de oro de la profesi\u00f3n para este fot\u00f3grafo que usaba taxis si hac\u00eda falta ir a hacer los reportajes, mientras otros, cuenta, \u00abesperaban a ver si sal\u00eda el director o alguno para que le llevara\u00bb.<\/p>\n
Tuvo que hacer m\u00e1s de una boda por la provincia y todav\u00eda recuerda el impacto que le caus\u00f3 su primera visita a La Ba\u00f1a, en La Cabrera. \u00abEn cierta ocasi\u00f3n llev\u00e9 la ampliadora para revelar y darles las fotos all\u00ed mismo. Pero no hab\u00eda ning\u00fan cuarto por el que no entrara la luz y acab\u00e9 revelando debajo de la cama\u00bb, comenta.<\/p>\n
Una profesi\u00f3n que ama y que ten\u00eda sus riesgos. \u00abVivo a cuenta de no haberme ca\u00eddo por el hueco del ascensor cuando estaba en obras el Hostal de San Marcos. Ven\u00edan autoridades y para ir retratando iba reculando…\u00bb, comenta. Menos mal que le avisaron a tiempo.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
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