la galer\u00eda berlinesa Camera Work<\/a>\u00a0su \u00faltima e imponente exposici\u00f3n: ‘Camera work rocks’. Son 100 retratos de la ‘cr\u00e8me’ del universo rock del \u00faltimo medio siglo: de Johnny Cash, The Rolling Stones, The Beatles o Jimi Hendrix a Lady Gaga, Snoop Dog, Jay-Z, Kanye West o Rihanna, pasando por David Bowie, Iggy Pop, Madonna, Sting, Elton John o Patty Smith, todos ellos capturados en su salsa por maestros como Richard Avedon, Anton Corbijn, Annie Leibovitz, Gered Mankowitz, Albert Watson, Herb Ritts o Peter Lindbergh.<\/p>\n\u00abNuestra intenci\u00f3n era presentar algunos ‘highlights’ de la fotograf\u00eda musical, diversos retratos de los m\u00fasicos m\u00e1s famosos del mundo realizados por algunos de los fot\u00f3grafos m\u00e1s prestigiosos, as\u00ed que lo m\u00e1s complicado de todo fue minimizar nuestra selecci\u00f3n a solo 100 obras\u00bb, admite Alexander Golya, uno de los comisarios de la muestra, que se podr\u00e1 ver hasta el hasta el 17 de agosto en esta galer\u00eda del -cada vez m\u00e1s vibrante- barrio de Charlottenburg. ‘Camera work’ posee una de las colecciones m\u00e1s importantes de fotograf\u00eda que existen -contin\u00faa-, as\u00ed que muchas de las piezas que se exhiben son propiedad nuestra, pero ha habido otras que han sido cedidas por los propios artistas: muchas son ejemplares vintage o \u00fanicos\u00bb.<\/p>\n
Entre esos ‘highlights’ destacan la legendaria (y lis\u00e9rgica) serie en la que Richard Avedon inmortaliz\u00f3 a The Beatles en agosto de 1967, pocas semanas despu\u00e9s de haber publicado ‘Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band’, o el retrato de David Bowie que Brian Duffy realiz\u00f3 para la portada de ‘Aladdin Sane’ (1973), con un rayo cruzando la cara del m\u00fasico londinense, un aut\u00e9ntico icono de la fotograf\u00eda pop, reproducido una y mil veces en los soportes m\u00e1s insospechados. O, incluso, barriendo para casa, el dram\u00e1tico barroquismo con el que Till Lindemann, cantante de Rammstein, posa para el madrile\u00f1o Eugenio Recuenco.<\/p>\n
\u00abTanto fot\u00f3grafos como m\u00fasicos son personas muy creativas, que no s\u00f3lo hacen arte, sino que lo viven -explica Golya-. En el momento en el que ambos se unen, puede salir algo muy especial. Esa es la raz\u00f3n por la que a tantas estrellas del pop les encanta trabajar con un fot\u00f3grafo espec\u00edfico. Desde el momento en el que la m\u00fasica rock engloba un mont\u00f3n de emociones e, incluso, estilos de vida, es casi obligatorio presentarse a uno mismo en im\u00e1genes de una manera que subraye cada car\u00e1cter\u00bb.<\/p>\n
Y, para car\u00e1cter, el de The Rolling Stones, que se lleva la palma como el grupo con m\u00e1s fotograf\u00edas dentro la exposici\u00f3n: desde sus inicios, en los que no les import\u00f3 travestirse para Jerry Schatzberg en la portada del single ‘Have you seen your mother, baby, standing in the shadow?’ (1966), hasta su \u00faltima y m\u00e1s ajada etapa en la que Peter Lindbergh hizo de las suyas con el careto de Keith Richards a tama\u00f1o XXL.<\/p>\n
\u00abThe Rolling Stones es una de esas bandas que ha trabajado desde el inicio de su carrera con los fot\u00f3grafos m\u00e1s exitosos de cada \u00e9poca\u00bb, concluye Golya. \u00abEscoger una sola de las piezas ser\u00eda realmente dif\u00edcil, porque son muy vers\u00e1tiles y durante todos estos a\u00f1os han desvelado la mayor\u00eda de sus facetas en sus fotos, pero sin duda los trabajos que Albert Watson, Anton Corbijn, Gered Mankowitz, Bob Gruen o los propios Schatzberg y Lindbergh hicieron junto a ellos forman parte de los m\u00e1s sobresalientes jam\u00e1s realizados en este campo\u00bb.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
El Mundo \/ Durante muchos muchos a\u00f1os, casi en la Prehistoria (tambi\u00e9n conocida como era pre-internet), los fans de las estrellas del rock coleccionaban sus fotos cual folcl\u00f3rica estampitas de la Virgen de Regla. Eran las \u00fanicas im\u00e1genes de unos \u00eddolos, al margen de las escasas apariciones en televisi\u00f3n,<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[33,22,27],"tags":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"","jetpack_shortlink":"https:\/\/wp.me\/p7Ropt-25O","_links":{"self":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8048"}],"collection":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=8048"}],"version-history":[{"count":2,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8048\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":8053,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8048\/revisions\/8053"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=8048"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=8048"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=8048"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}
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El Mundo \/ Durante muchos muchos a\u00f1os, casi en la Prehistoria (tambi\u00e9n conocida como era pre-internet), los fans de las estrellas del rock coleccionaban sus fotos cual folcl\u00f3rica estampitas de la Virgen de Regla. Eran las \u00fanicas im\u00e1genes de unos \u00eddolos, al margen de las escasas apariciones en televisi\u00f3n, a las que el aficionado medio ten\u00eda acceso. La instant\u00e1nea, ya fuera robada por un ‘paparazzo’, tomada en un concierto o realizada con motivos promocionales por un artista de renombre, adquir\u00eda condici\u00f3n casi m\u00edstica.<\/p>\n