Muchos profesionales denunciaron que el trabajo del italiano no es fotoperiodismo sino arte<\/strong>\u00a0y finalmente la organizaci\u00f3n ha decidido retirarle el premio al considerar que el autor ha vulnerado las normas exigidas para presentarse al concurso.<\/p>\nLa serie de fotograf\u00edas de Troilo, presentada en la categor\u00eda de\u00a0Temas de Actualidad<\/em>\u00a0bajo el t\u00edtulo\u00a0Ciudad negra<\/em>, retrata la miseria y la degeneraci\u00f3n en uno de los barrios de Charleroi. Lo hace con iluminaci\u00f3n artificial y en ocasiones las situaciones captadas por su objetivo no esconden su cuidada puesta en escena. En una de las instant\u00e1neas, por ejemplo, es su propio primo el que simula estar en un coche en una situaci\u00f3n \u00edntima con su pareja.<\/p>\nPor ello,\u00a0cuando se le otorg\u00f3 el galard\u00f3n muchos compa\u00f1eros de profesi\u00f3n y el propio alcalde de la localidad denunciaron esta manipulaci\u00f3n escenogr\u00e1fica<\/strong>. Seg\u00fan el alcalde de Charleroi, Paul Magnette, una de las instant\u00e1neas ni siquiera se tom\u00f3 en esta ciudad, en contra de lo que se apunta en el pie de foto. Indignado en parte por la imagen negativa que el italiano da de la urbe, Magnette lleva d\u00edas criticando la \u00abgrave falsificaci\u00f3n de la realidad\u00bb de Troilo y hab\u00eda pedido que se le retirara el galard\u00f3n. Seg\u00fan el pol\u00edtico, su trabajo \u00abse hace pasar por fotoperiodismo cuando hay actores que han posado en los espacios dentro de una puesta en escena con iluminaci\u00f3n artificial\u00bb.<\/p>\nLa decisi\u00f3n del World Press Photo de retirarle el galard\u00f3n a Giovanni Troilo pone fin a semanas de pol\u00e9mica. Horas despu\u00e9s del fallo del jurado muchos reporteros reconocidos criticaron en las redes sociales el efecto dram\u00e1tico y forzado de las im\u00e1genes, tomadas con flash y escenificadas.<\/p>\n
Muchos reporteros que se postularon para el concurso, algunos con series tomadas en Irak o Siria, denuncian que Troilo ha traspasado la l\u00ednea que separa el periodismo de la imagen art\u00edstica y\u00a0algunos incluso amenazaron con boicotear al certamen y no volver a presentarse m\u00e1s si la organizaci\u00f3n no se retractaba<\/strong>.<\/p>\nJean Fran\u00e7ois Leroy, director del festival de fotoperiodismo Visa pour l’Image de Perpignan, advirti\u00f3 que no expondr\u00eda este a\u00f1o los trabajos premiados del World Press Photo. \u00abLos fotoperiodistas que defendemos en el certamen no llaman a sus primos para fornicar en un coche. Los reporteros que queremos impulsar no iluminan con flash de estudio para que las fotos parezcan una pintura holandesa\u00bb, denuncia Leroy, para quien Troilo \u00abes un artista, quiz\u00e1 con talento, pero no fotoperiodista\u00bb.<\/p>\n
Aunque al principio el World Press Photo siempre apoy\u00f3 la versi\u00f3n del autor, finalmente ha rectificado tras constatar que su trabajo no se ajusta a los valores del concurso y ha lamentado la grave falta de \u00e9tica por parte del autor. \u00abTroilo ha reconocido por tel\u00e9fono que una de las im\u00e1genes no fue tomada en Charleroi, en contra de lo que dijo cuando se present\u00f3 al concurso. Esta informaci\u00f3n falsificada constituye una violaci\u00f3n de las reglas del concurso\u00bb, afirman.<\/p>\n
El World Press Photo es uno de los cert\u00e1menes m\u00e1s prestigiosos del mundo. Aunque en los \u00faltimos a\u00f1os ha tratado de premiar im\u00e1genes diferentes a las cl\u00e1sicas del\u00a0breaking news<\/em>, las reglas son estrictas y claras y proh\u00edben la manipulaci\u00f3n, la clonaci\u00f3n as\u00ed como la eliminaci\u00f3n de elementos para preservar la integridad del fotoperiodismo documental.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"El Mundo \/ Uno de los debates m\u00e1s controvertidos en las escuelas de fotograf\u00eda es el que aborda la l\u00ednea que separa el fotoperiodismo de la imagen art\u00edstica. Algunos puristas, por ejemplo, excluyen del primer grupo el trabajo de Sebastiao Salgado, uno de los fot\u00f3grafos documentales m\u00e1s reconocidos del mundo. Le<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[18,22,27],"tags":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"","jetpack_shortlink":"https:\/\/wp.me\/p7Ropt-3xk","_links":{"self":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/13598"}],"collection":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=13598"}],"version-history":[{"count":3,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/13598\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":13602,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/13598\/revisions\/13602"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=13598"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=13598"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"http:\/\/focusleon.es\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=13598"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}
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El Mundo \/ Uno de los debates m\u00e1s controvertidos en las escuelas de fotograf\u00eda es el que aborda la l\u00ednea que separa el fotoperiodismo de la imagen art\u00edstica. Algunos puristas, por ejemplo, excluyen del primer grupo el trabajo de Sebastiao Salgado, uno de los fot\u00f3grafos documentales m\u00e1s reconocidos del mundo. Le critican el preciosismo que busca en sus im\u00e1genes de denuncia. \u00abYo no soy artista, soy fotoperiodista\u00bb, ha reivindicado en varias ocasiones el brasile\u00f1o.<\/p>\n